¿Por qué necesito una web? (II) No confíes solo en las RRSS

A menudo cuando me encargan el diseño de una pagina web, percibo en el cliente que no le da a ésta la importancia que realmente merece. Parece lógico. Confía más en las redes sociales, que sin duda es innegable, dan una conversión o lo que vulgarmente llamamos “resultados“ de forma más inmediata con “poco” esfuerzo.

A simple vista el alcance y divulgación de los contenidos parece más inmediato y esas estadísticas fáciles en forma de likes, y followers las hacen muy atractivas.

Las webs disponen de métricas que permiten ver también alcances y repercusiones hasta más completas que las que ofrecen las redes sociales, puesto que podemos ver detalladamente y de forma individual, cuáles son los artículos de interés de nuestros visitantes, el tiempo que permanecen en la página, y hasta sus características de edad, sexo y lugar de origen.

A menudo en Instagram por ejemplo nos limitan el numero de palabras en la descripción de una publicación, o bien pueden incluso hasta censurarnos el contenido o reducir también por el famoso algoritmo su alcance a un porcentaje bajo de nuestros seguidores. Es la red social ideal para “anunciar” y divulgar algún contenido pero que necesita de algún lugar como una web, donde ampliar la información y consolidar el objetivo que nos habíamos propuesto al hacer la publicación.

Hay que tener en cuenta que por ejemplo, para disponer de una tienda e-commerce online para vender a través de redes sociales como son Instagram o Facebook,  se requiere y dependen ambas, de una tienda “madre” diseñada en plataformas como por ejemplo Woocommerce que debe estar alojada en una web propia.  Este ya es un motivo con mucho peso específico para valorar realmente el disponer de una web.

Además de estas dos redes sociales que son a día de hoy (sobretodo Instagram) buenos sitios de venta, existen portales para vender productos e-commerce como Etsy o Amazon, pero que en sus características por el servicio, incluyen una comisión por venta. En una web propia no hay comisión alguna.

Y hay un motivo también muy destacable a la hora de apostar por una web: a diferencia de las redes sociales, una web depende al 100% solo de nosotros. No estamos a merced de las condiciones de la política de la red social y de sus posibles bloqueos, ni de las tendencias y modas.

Y sobretodo una web no es volátil. Todos recordamos redes sociales que parecían solidas y son un recuerdo actualmente.

• Google disponía de una plataforma competencia de Facebook, Google +.
• Microsoft de su chat MSM Messenger antesala del actual WhatsApp.
• MySpace para maquetas musicales desbancada por YouTube y SoundCloud.
• Fotolog precursor de Instagram.
• Vine para videos cortos precursor de Snapchat o del más reciente TikTok, absorbido por Twitter.
• Twenti red española para publico joven desbancada por WhatsApp.

Todas y cada una de ellas hoy son puras anécdotas.  Ahi quedaron sus followers, likes y horas invertidas, en la nada.

Los cambios seguirán sucediendo. Redes como Facebook están perdiendo en los últimos años usuarios a marchas forzadas. El público joven no la usa. Piensa quien edad tiene tu público o cliente potencial. Instagram también lucha contra en recién aparecido y feroz TikTok.

Todo ello nos debería hacer pensar en donde estamos invirtiendo el tiempo, la energía y el dinero. Por que estas redes sociales son perecederas. Funcionan hoy.

Sin descartar otro riesgo habitual en las redes, perder el control de la cuenta, son numerosos los casos de caer en trampas donde el propietario pierde el control o su cuenta es hackeada y de la noche a la mañana ese perfil ya no es controlado por el.

En resumen disponer de una página web es una inversión segura a largo plazo, adaptable a la medida de tus necesidades  y de la que dispones del control absoluto de todo. Las redes sociales son un complemento y ayudan a divulgar nuestra web. Apuesta por ella !

Si te perdiste el primer artículo sobre ¿Por qué necesito una web? puedes leerlo aquí